Allá por el año 1977, lo único que sabía del banjo era que había un instrumento que se llamaba así. Desesperado por saber algo más, sólo atinaba a pasar por la vidriera de Casa América (en Av. de Mayo en Capital) y si tenía la suerte de poder ver uno, descuartizarlo con la mirada e intentar copiar con mis retinas toda la información que permitiera hacerme uno. También me ayudó la tapa de uno de los discos de los “Red Hot Banjos” en la que aparecía Roberto Garzoni y Billy Thomas tocando. Eso me sirvió para medir con un escalímetro las dimensiones de cada uno de los banjos y así “copiarlos”. Luego de eso me construí tres banjos, que ahora, a la luz de la lejanía, eran super primitivos aunque sonaban(dos de ellos pueden verse en la foto de presentación de este blog).
En 1982 me tocó la colimba en Ciudadela, un poco lejos de mi casa en City Bell. Y para evitar tener que quedarme a sufrir en el cuartel, cuando tenía franco, me iba a caminar por casas de música en Capital.
Un día encontré en la vidriera de una casa de música que vendía especialmente guitarras (creo que se llamaba Celestino Fernandez) de Rodríguez Peña y Cangallo dos banjos en vidriera!!!. Cosa de no creer?!
Desde ese momento pasé casi todos los días y durante meses por la vidriera. En ese entonces creo que costaban algo así como 360.000 pesos. Decidí juntar el dinero para comprar uno.
A los 5 meses, cuando había juntado lentamente el dinero, observo con desesperación que el precio de vidriera había subido a 580.000. Totalmente enloquecido y aún con uniforme de soldado entré al negocio y le pregunté al dueño como podía ser que si el día anterior costaba 360.000, ahora cueste 580.000 ?.
Debí tener una verdadera cara de desesperación, la que sumada a mi uniforme y mi pelada militar (y tal vez lo difícil de vender un banjo coreano en Buenos Aires), hizo que el dueño me lo dejara al precio viejo. Que maestro!!!!!!.
En 1982 me tocó la colimba en Ciudadela, un poco lejos de mi casa en City Bell. Y para evitar tener que quedarme a sufrir en el cuartel, cuando tenía franco, me iba a caminar por casas de música en Capital.
Un día encontré en la vidriera de una casa de música que vendía especialmente guitarras (creo que se llamaba Celestino Fernandez) de Rodríguez Peña y Cangallo dos banjos en vidriera!!!. Cosa de no creer?!
Desde ese momento pasé casi todos los días y durante meses por la vidriera. En ese entonces creo que costaban algo así como 360.000 pesos. Decidí juntar el dinero para comprar uno.
A los 5 meses, cuando había juntado lentamente el dinero, observo con desesperación que el precio de vidriera había subido a 580.000. Totalmente enloquecido y aún con uniforme de soldado entré al negocio y le pregunté al dueño como podía ser que si el día anterior costaba 360.000, ahora cueste 580.000 ?.
Debí tener una verdadera cara de desesperación, la que sumada a mi uniforme y mi pelada militar (y tal vez lo difícil de vender un banjo coreano en Buenos Aires), hizo que el dueño me lo dejara al precio viejo. Que maestro!!!!!!.
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